La joya del sur
La reserva también es conocida como la joya del sur de Johannesburgo, debido a su gran biodiversidad. La reserva alberga cebras, springboks, búbalos y ñus. Klipriviersberg es un paraíso para aficionados a las aves: se han detectado más de 215 especies de aves diferentes en la reserva natural de 680 hectáreas. Estas aves habitan entre 600 especies diferentes de plantas autóctonas. La mayoría de los visitantes del parque pasean por la amplia red de senderos. Las rutas a pie pasan de sencillas y llanas a desafiantes y escarpadas. También se trata de un destino muy recomendable para familias con niños. El segundo y cuarto domingo de cada mes, hay rutas a pie gratuitas con un guía. De este modo, puede volver a casa sabiendo más de la flora y de la fauna sudafricana.
Prehistoria en el parque
El patrimonio de Klipriviersberg se remonta a la prehistoria. Algunos hallazgos arqueológicos han revelado que el hombre prehistórico cazaba animales salvajes en esta región. Mucho tiempo después, a partir del siglo XV, las tribus Tswana se asentaron aquí. Un siglo después de su partida, el país fue ocupado por Sarel Marais, un granjero. Las ruinas de su granja se pueden seguir viendo en la zona sur de la reserva. En torno al 1900, esta zona fue un importante campo de batalla durante la Segunda Guerra Anglo-Bóer.